Silvia Sanz, psicóloga, terapeuta sexual y de pareja

Con la perspectiva del tiempo miro atrás y me gustaría pensar que todo lo que nos ocurre en la vida, sucede por algún motivo. Cada uno de mi errores, frustraciones, abandonos o rupturas que he experimentado, me han ayudado a aprender de cada obstáculo, pero sobre todo a entender a los demás de un modo más profundo.

Muy pronto entendí lo que todos descubrimos tarde o temprano: que la vida nos obliga constantemente a superar dificultades. Algunos somos capaces de vencerlos solos, pero para otros…necesitamos ayuda. Y despertó en mí el deseo de guiar a las personas a dejar atrás sus miedos, preocupaciones y problemas. La psicología nunca fue una elección académica…era mi auténtica vocación.

Para simplificar quien soy en pocas líneas diré que amo mi profesión y a través de la psicología acompaño a las personas en su camino para lograr que superen las distintas dificultades que se presentan en la vida y consigan sus objetivos mediante diferentes técnicas de terapia breve y cognitivo conductual para continuar lidiando con las adversidades.

Si te preguntas cómo puedo ayudarte, solo puedo decirte que mi objetivo es dotar a cada persona del enfoque adecuado para saber de un modo concreto que puedes cambiar y proporcionarte las claves adecuadas para alcanzarlo:  obsesiones, celos, estados de ánimo bajo, desmotivación, disfunciones sexuales a conflictos personales o de pareja, crisis vitales, etc.

Han transcurrido casi 25 años desde que di mis primeros pasos como psicóloga con la creación de un Instituto de psicología y sexología en Madrid y, aún hoy, conservo intacta mi pasión por mi profesión.

Durante todo este tiempo, he ayudado a diferentes personas en su desarrollo personal, a parejas a solucionar sus conflictos de comunicación o sexuales, a adolescentes a encontrar su camino…pero, fundamentalmente, todos ellos me han enseñado algo que el filósofo Séneca expresó con las siguientes palabras:

No es porque las cosas sean difíciles por lo que no nos atrevemos con ellas; es porque no nos atrevemos con ellas por lo que son difíciles.

En muchas ocasiones, nuestros propios pensamientos, nos impiden gestionar adecuadamente nuestras emociones y nos bloquean. Los problemas siempre estarán ahí, pero, junto a ellos, aunque no las veas…estarán las soluciones.

Y si has llegado hasta aquí y me estás leyendo, seguramente quieras obtener resultados diferentes y por ello deseas iniciar algo distinto.

Estarás de acuerdo conmigo que, para lograr vivir de un modo pleno, fluido, seguro y sereno, es imprescindible conocerse a uno mismo, descubrirse, amarse y sobre todo ser coherente con cada una de las decisiones que tomamos en la vida. Así intento llevar mi vida y, de esta forma, oriento a los demás para lograr sus objetivos.